domingo, 17 de junio de 2012

Torchwood - Realidad Alternativa - 4º parte


Info: Este fic se sitúa un tiempo después del capítulo de la radio deTorchwood: Death House . Estamos intentando crear nuestro mundo alternativo, visto lo visto lo que ocurre en la serie y con el cual no estamos contentos.
Torchwood y la mayoría de los personajes de éste fic son creación y propiedad de Russell T. Davies y la BBC.


Ianto pisó el primer escalón de las escaleras cuando de nuevo, la voz de Gwen le detuvo.
-Ianto Jones! Hay un baño arriba, siéntete libre de usarlo y sobre todo, no mancharme nada!- Ianto parpadeó perplejo, se imaginaba como Gwen le señalaba mientras le decía eso, era la única persona que conocía que, en una situación como esa se preocupaba de algo tan trivial.

Asintió, sabiendo que no le vería y continuó subiendo las escaleras, impaciente. No quería correr para mantener la compostura aunque, teniendo en cuenta su traje rasgado y la apariencia que gastaba en ese momento, no era muy fácil.

Llegó a la habitación y entró, cerrando la puerta tras él. Respiraba acelerado por la boca, más por nerviosismos que por cansancio al subir.
Dejó la bolsa sobre una mesa pequeña y redonda situada a su derecha, percatándose de, que la puerta que había al lado de ésta, era la de un baño.

-Supongo que para los invitados...- Musitó dando la espalda a aquello y caminando hacia su amante.

Se sentó al borde de la cama, al lado del capitán, apartándole el flequillo de la cara. Estaba sudado, con el pelo desaliñado. Ianto sonrió apenado al ver como su amante se había dejado.
Se levantó y caminó hacia el baño. No era un baño muy grande aunque si lo suficiente para que dos personas pudieran estar dentro sin complicaciones. Rebuscó el los armarios lacrados de blanco hasta encontrar lo necesario para limpiar a Jack.

Descolgó la alcachofa de la ducha y encendió el grifo esperando a que saliera el agua caliente para llenar el balde que había encontrado.
Mientras se llenaba llevó el resto de cosas a la habitación, colocándolo sobre la mesilla situada al lado izquierdo de la cama.
Volvió al baño y cerró el grifo antes de coger el balde, ya lleno y llevarlo a la mesilla, colocándole al lado del resto de cosas.
Comprobó que la temperatura estaba algo caliente y aunque sabía que eso no le causaría daño al capitán, prefirió esperar a que se enfriara mientras se ocupaba de desvestirle.


Desabrochó sus tirantes, como muchas veces antes lo había hecho en el pasado, en sus encuentros en la oficina. Ver como la misma goma del tirante, tiraba para recogerse en si misma le hacia estremecerse, adoraba esa sensación.
Negó con la cabeza, si comenzaba a centrarse en los pequeños detalles no sabría si podría contenerse, muchas veces antes lo había conseguido pero ahora, sabiendo que hacia tiempo de la última vez... todo le parecía lejano.

Con pulso firme comenzó a desabrochar su camisa azul clara, dejando ver su camisa interior blanca, que estaba tomando ya un color amarillento. Ianto chasqueó la lengua. Apenas podía creerse que fuera el mismo Jack. Siempre iba bien acicalado, y más desde que era él quien le limpiaba la ropa pero, un cambio así, jamás se lo habría imaginado.

Le levantó por la espalda con una mano mientra con la otra le retiraba la camisa. No le fue tan fácil con la camiseta interior, tuvo que colocarse sobre él, con ambas piernas a sus lados para tirar hacia arriba. Esa postura le hacia recordar y eso no ayudaba a la hora de desvestirle.
Aún así, el inglés se tomó la libertad de inclinarse sobre su amante y besarle levemente los labios. Apenas unos segundos y suspirar en sus labios.

Ianto le miró de cerca, y acarició sus pómulos con la yema de los dedos. Le echaba de menos y deseaba que en esos momentos estuviera despierto.
-Espero que no tardes mucho...

Dejó caer la ropa al suelo, le hubiera gustado prenderla fuego debido al estado en el que se encontraban pero desconocía si Jack había traído cambio.


El inglés decidió no pararse a mirarle y quitarle la ropa sin pensar, arreglándoselas para mover el cuerpo de su amante con dificultad para retirar toda la ropa que llevaba puesta.
Una vez que, lo tenía desnudo sobre la cama, lo miró de arriba abajo y carraspeó, para despertarse así mismo y proseguir con su tarea. El lavado.

Comprobó que la temperatura ya era agradable y sumergió la esponja en el agua, escurriéndola después y vertiendo gel sobre ella. Estiró uno de los brazo de su amante y le frotó con la esponja. dejando escurrir el agua por todo el y viendo como goteaba sobre la cama.

Hizo lo mismo con el rstso de sus extremidades, pues, lo que le ponía algo más nervioso era ya el torso y la parte de abajo del vientre. Ianto resopló, intentando ser firme y comenzó a pasar la esponja por el torso de su amante, acariciando cada  curva de sus pectorales, descendiendo hasta aquella parte que muchas otras veces había sido tocada por él, aunque por motivos diferentes. Cerró los ojos, intentando no perderse así mismo en aquel baño, y solo, al darse cuenta de que el cuerpo de Jack reaccionaba a su tacto, los abrió, dejó caer la esponja  dentro del balde y con prisa le dio la vuelta, dejandole boca abajo sobre la cama. Le limpió la espalda y  le secó con rapidez con una toalla para después cubrirle con una sábana.
Ianto no pensaba, se sentía avergonzado por aquello y feliz, al estar seguro de que Jack se encontraba aún de lo más vivo.

Fue al baño a cambiar el agua, coger nuevas toallas, y a tranquilizarse y tomar aire.
-Como siempre... haces que me tiemble todo aunque no estés consciente...- Murmuró mirándose al espejo.

Tomó el agua limpia de nuevo y volvió a su sitio una vez más calmado, dispuesto a lavarle la cabeza.
-Haré que me pagues este servicio...- Sonrió burlón, aunque estaba encantado de poder cuidar así de su amante.